El hombre destruyó el mundo en siete días...
Destruyó el primer día todos los animales
que poblaban la tierra;
el segundo quemó las plantas y los árboles,
los bosques y las selvas;
en el día tercero contaminó los ríos,
océanos y mares;
el cuarto echó a perder las nieves y humedales;
el quinto terminó con la capa de ozono
y con las estaciones;
el sexto hizo ocultarse la luna y las estrellas;
y en el séptimo día, orgulloso de ver
hasta dónde alcanzaba todo su poderío,
exterminó a los dioses.
© Juan Ballester
3 comentarios:
Por dejar zanjado este tema, este es el poema gemelo del anterior, escrito el mismo día como ya dije (2 de abril de 2003). Sin ser maravillosos ninguno de los dos, creo que el otro al menos tiene un final algo más brillante que éste.
A mí sí me parecen los dos bastante maravillosos. Y me da envidia no haberlos escrito yo. ¡Enhorabuena!
¿De verdad cree usted que somos tan importantes? Creo que el hombre de hoy, más descreido que nunca se cree más Dios que siempre.
Les pido coerencia entre vida y pensamiento
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