No te amo, o tal vez te amo demasiado
con la desolación de los juguetes rotos,
de la puerta que un día se cerrará por siempre
o del tren que se escapa rumbo a ninguna parte.
No te amo, lo sé, pero si yo te amara
sería parecido a lo que siento ahora,
algo blando, intangible, algo como una nube
que en lugar de tormentas descarga arena y versos.
Qué pequeño me siento al pronunciar tu nombre,
al mirarte a los ojos, al ensuciar tu imagen,
voy como de puntillas por el dolor y el sueño.
No te amo, y en cambio pienso en ti día y noche
arrastrando este fango de horror y de locura
que, como un torbellino, suele martirizarme.
©Juan Ballester
1 comentario:
Este poema es del año 2000 y lo escribí, como todo el poemario, a una compañera de trabajo, casada y madre de una hija. De ahí ese tono desesperado o de resignación que desprenden todos sus versos.
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