Lejana lejanía en la ventana.
Llueve, quizá, dolor, melancolía.
Y yo entono una extraña letanía
recordando el ayer de esta mañana.
Lejana lejanía, tan lejana
como el silencio de mi boca umbría.
¿A quién podría ahora, a quién podría
contar que estuvo aquí, cierta y temprana?
Me arrastro por la ausencia y la desgana,
me mortifica el tiempo, la apatía,
y de nada me sirve la poesía
en esta noche cruel que se engalana.
¡Pensar que estuvo aquí y que la tirana
realidad me ha devuelto a la afonía!
¡Pensar que vuelvo a ser lo que solía,
pensar que en mi jardín ya no hay manzana!
Lejana lejanía de oro y grana
donde no queda espacio para el día;
lejana soledad... Pero fue mía
hace unas horas solo, esta mañana.
© Juan Ballester
2 comentarios:
wowww oye cada verso tuyo es maravilloso.
Me fascina leerte.
Pues si estos son tus hijos eres un gran padre
Besos
Que tengas un maravilloso fon de semana.
¿A qué esperan los editores para publicarte?
Felicidades, Juan, qué bien escribes "puñeterooooooooo"
Un afectuoso abrazo,
María José
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