Soy pobre, pero tengo tu sonrisa,
pero tengo tus ojos a mi lado;
soy un mendigo casi, un olvidado
que no olvida esa boca que precisa.
Soy un pobre diablo, muevo a risa
aunque tu voz me alivia de ese estado,
no me queda ya más que un verde prado
y un futuro de versos y sin prisa.
Apenas tengo un trozo de cartón,
un retrato que miro con fruición
en la noche interior de mi pobreza.
Apenas tu recuerdo y las paredes
y una mano que quiere que te quedes
para llenar de flores mi cabeza.
© Juan Ballester
1 comentario:
"llenar de flores mi cabeza", bonita imagen.
Besos
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