Poema de la espera

Vuelve otra vez el tiempo vestido de burbujas
a llenarme las manos de versos y ternura,
a poner en mi mesa el pan de lo imposible,
a apaciguar la sed de un corazón errante.

Vuelve otra vez el tiempo de sílabas sonoras,
de alondras matinales, de manos temblorosas,
vuelve otra vez a darme la ilusión de la estrella,
el regalo de un labio, el final de un invierno.

Vuelve otra vez el tiempo que creí ya imposible
donde los edificios envidian a la rosa
y donde las ventanas juegan a ser princesas
esperando impacientes a que llegue una carta.

Vuelve otra vez, de nuevo los arroyos dan flores,
las palabras se huelen, los silencios se abren,
nuevamente los árboles sueñan con ser campanas
nuevamente los gatos salen de sus tejados.

Y es que mi piel herida se ha vuelto mariposa,
y es que mis manos turbias desempolvan recuerdos
y es que se me ha llenado el alma de cangrejos
sabiendo que esta noche por fin veré tu rostro.

© Juan Ballester