miércoles, 14 de septiembre de 2011

Esta página en blanco

Esta página en blanco me pregunta por ti
como un muro encalado donde escribo tu nombre;
este papel sin mancha que espera como el viento
el momento en que, acaso, se sequen los océanos.

Este trozo de arena que en mis manos resbala,
que castiga mi mente y atenaza mi lengua,
esta extensión maldita que aún no te conoce
donde habrán de morir versos que no te he escrito.

Esta hoja rebelde que no admite palabras,
donde el silencio es norma y el olvido es la meta,
como un potro salvaje que galopa a tu encuentro
sin saber si en el alma germinará el mañana.

Este espacio vacío que en vano se emborrona
con el sueño improbable de tu risa y tus ojos
mientras los trenes huyen y los mares se alejan
y el frío se apodera de mis pies lacerados.

Esta rosa sin dueño, este pájaro mudo
que no habrán de adornar el jardín de mis versos,
esta herida sin sangre donde crecen relojes
y las cartas no empapan el sudor de mis labios.

Esta página en blanco que está en deuda contigo
y que habrá de acabar rota en una cuneta,
este fragmento ínfimo de un corazón que late
como vela encendida por si llegas de noche.

© Juan Ballester

1 comentario:

Manolo Benages dijo...

Me ha gustado mucho como has expresado tus sentimientos en este poema. Ela amor siempre es más fuerte en la ausencia.